Mi señor don
gato
Mi señor don
gato
hoy amaneció
enfermo
postrado
por hondo
dolor.
Su esposa alarmada,
llena de
aflicción,
dispuso que a
escape
viniera el
doctor.
Unas quince
ratas
‘diz que’
devoró;
mas, claro, le
vino
seria
indigestión.
Si a morir
llegase
¡no lo quiera
Dios!
él tendría la
culpa
porque fue
glotón.
Miau, miau,
miau,
porque fue
glotón.
Popular
mexicana
No hay comentarios:
Publicar un comentario