Bajo el mar
Ariel.
Escúchame. Ese mundo está muy mal.
La
vida bajo el mar es mucho mejor que el mundo allá arriba.
Tú
crees que en otros lagos las algas más verdes son
y
sueñas con ir arriba, ¡y que gran equivocación!
¿No
ves que tu propio mundo no tiene comparación?
¿Qué
puede haber allá afuera que causa tanta emoción?
Bajo
del mar, bajo del mar
vives
contenta, siendo sirena eres feliz,
Sé
que trabajan sin parar y bajo el sol para variar,
mientras
nosotros siempre flotamos
bajo
el mar.
Los
peces son muy felices, aquí tienen libertad,
los
peces allá están tristes, sus casas son de cristal.
La vida de nuestros peces muy larga no suele
ser.
Si
al dueño le apetece a mi me van a comer.
Bajo
el mar, bajo el mar
nadie
nos fríe ni nis cocina en una sartén.
Si
no te quieres alinear bajo el mar te quedarás
y
sin problemas entre burbujas
tú
vivirás.
Bajo
el mar, bajo el mar,
hay
siempre ritmo en nuestro mundo al natural.
La
manta-raya tocará, el esturión se unirá.
Siempre
hay ritmo, ritmo marino
bajo
el mar.
Oye
la flauta, oye el arpa,
al
contrabajo pon atención,
veras
la trompeta y el tambor-
Disfruta
de tu canción, sí.
Con
la marimba y el violín,
las
truchas volteando, el otro cantando
y
sin olvidar los del clarín,
Que
empiece la función.
Sí,
bajo el mar, bajo el mar.
Hay
bailarinas, son las sardinas, ven a bailar.
¿Para
qué quieres explorar si nuestra banda va a tocar?
Hay
castañuelas, son las almejas bajo el mar.
Y
las babosas están tan mocosas bajo el mar.
El
caracol es saxofonista
y
las burbujas llenan la pista
para
que bailes en esta fiesta
bajo
el mar.